Tarea 1. Mi entorno

Rincones del Jardín Botánico de la Universidad de Valencia, específicamente el del invernadero de la Balsa.
Para poner un poco en contexto, el Jardín Botánico es un espacio considerado como museo destinado a la investigación, conservación y divulgación de especies de plantas raras, endémicas y amenazadas. Además, es un lugar en el que la arquitectura tiene gran importancia, no solo porque es considerado patrimonio de interés cultural e histórico, sino porque gracias a la arquitectura y diseño de sus invernaderos, las diferentes especies de plantan pueden conservarse¹.

“Mi pensamiento arquitectónico es buscar una combinación entre la naturaleza y la arquitectura; y cómo interactúan con las personas.”

Sou Fujimoto ²

Figura 1.

Para mí, es un oasis en mitad de la ciudad, un bosque en el que habitan cientos de especies de plantas. Un lugar al que no llega el ruido de los coches y solo se oye el eco de los cantos de las aves que viven en este jardín.

El rincón que he elegido es el que está ubicado en el estanque de plantas acuáticas, frente al Invernadero de la Balsa. El estanque está rodeado de bancos blancos de madera en los que puedes disfrutar del sol y sombra que te regalan los diferentes árboles que hay. Desde uno de esos bancos, detrás de la enorme fuente, se observa un invernadero en el que, desde esa vista, parece un prisma rectangular, sin embargo, conforme vas rodeando la balsa, entiendes la verdadera forma de cuadrante extrusionado.

Figura 2. Boceto propio del Invernado de la Balsa.

¿Cambiarías alguna cosa?
Bajo mi punto de vista no, es un lugar que ha de conservarse tal y como está. Un lugar que a lo largo de los años no ha cambiado, un espacio considerado escondido y es quizá, por esa razón, por la que se ha mantenido a lo largo del siglo, conservando sus vegetación y su encanto.

‘’Atmósferas’’ por Peter Zumthor

En este texto el arquitecto concibe la arquitectura como un entorno, una atmósfera, no solamente bella y útil sino conmovedora. Zumthor valora la experiencia sensorial y emocional de un espacio. Para él, la calidad de la arquitectura no se reconoce por la fama sino por la capacidad transmitir. Pone como ejemplo las primeras impresiones que se tiene de una persona y extrapola ese concepto a entrar por primera vez a un edificio. Esta impresión tiene que ver con la interacción directa entre la persona y el espacio, no solo física sino también emocional.

Señala nueve puntos claves que hace que la arquitectura emocione. En primer lugar el cuerpo de la misma, es decir, los materiales, las texturas, el peso. La presencia física en sí misma es fundamental. Seguidamente y en relación a ello, la coherencia entre esos materiales y cómo interactúan entre sí.

Por otro lado, da importancia al sonido del lugar. Cómo se propaga por los materiales, como por ejemplo, una conversación, o, cómo suena el viento dentro del edificio o cómo se oye el silencio dentro de este. También, para el arquitecto, la temperatura hace que un espacio sea agradable estar en él. Los objetos que rodean un entorno hacen de este, un espacio concreto, es decir, los detalles que forman parte construyen una historia, la atmósfera en sí misma.

Explica que la manera de desplazarse por el lugar es esencial, cómo nos guía o nos invita a explorar el lugar. Es fundamental para tener una experiencia determinada, si somos libres o estamos cohibidos al movernos por el espacio. Hay que encontrar el equilibrio: dar libertad pero sin olvidar el misterio. Con respecto a esto, la tensión entre el interior y el exterior enriquece la experiencia dando lugar a la privacidad o la exposición del entorno.

Las dimensiones también influyen a cómo nos sentimos dentro de un lugar; si nos sentimos intimidados o nos sentimos grandes, no en un sentido dimensional si no a un sentimiento de grandeza, un sentimiento extraordinario.

Por último, la luz tanto natural como artificial. Es esencial para ensalzar todo aquello que hay expuesto, cómo revela la belleza que envuelve la atmósfera: los materiales, los objetos…Cómo quiere el espacio ser percibido.

Creo comprender perfectamente a qué se refiere Zumthor pues así percibí el espacio que he elegido cuando estuve por primera vez. Entiendo este rincón del Jardín Botánico como una atmósfera que me evoca tranquilidad, donde los elementos que lo conforman y sus materiales dan cohesión a mi sentimiento.

El ligero invernadero de cristal y metal pintado de blanco a la espalda del gran estanque me indica que, cuando acabe de rodear la balsa, he de entrar. Pero con calma, pues el sonido del chorro de la fuente y las carpas nadando lentamente entre las raíces de las plantas me invitan a quedarme. Los bancos de madera en los que se puede disfrutar de la calidez del sol y la frescura de la sombra, me invitan, una vez más, a quedarme más tiempo.

Cuando entro al invernadero, y por fin rompo la tensión entre el exterior y el interior dejando atrás el sonido del agua, pero donde la calma no me abandona, encuentro una especie de vacío, en el que se me para el aliento, pues, al fin y al cabo, no deja de ser un invernadero de plantas tropicales: un espacio cálido y húmedo. Quizá se podría considerar que son dos atmósferas diferentes, una la del estanque y otra la del invernadero. Para mí no, para mi no es una sin la otra pues por eso mismo se llama el Invernadero de la Balsa, aunque sean dos espacios totalmente diferenciados, me conmueven de la misma manera, una atmósfera conjunta.

Figura 7. a) Puerta del Invernadero de la Balsa, b) Detalles de hierro del Invernadero Tropical, c) Ornamento del Invernadero de las plantas carnívoras, d) Invernadero de los helechos, e) Interior del Invernadero de la Balsa, f) Interior del Invernadero Tropical. Fuente propia.


Referencias bibliográficas
1. JARDÍ BOTÀNIC DE LA UNIVERSITAT DE VALÉNCIA. Jardibotanic.org.[Internet]. Citado el 4 de octubre de 2024, de https://www.jardibotanic.org

2.Words of wisdom from world architects: Sou Fujimoto. DesignSingapore Council. [Internet]. Citado el 4 de octubre de 2024, de https://designsingapore.org/stories/words-of-wisdom-from-world-architects-sou-fujimoto/

Figura 1. Foto de la entrada del Jardín Botánico de Valencia. Fuente propia.
Figura 2. Boceto propio del Invernado de la Balsa. Fuente propia.
Figura 3. Detalle del invernadero. Fuente propia.
Figura 4. Plantas acuáticas de la balsa. Fuente propia.
Figura 5. Vista actual del Invernadero de la Balsa. Fuente propia.
Figura 6. Postal antigua del Invernadero de la Balsa.Gascó, P. POSTALES DE VALENCIA. Blogspot.com.[Internet] Citado el 4 de octubre de 2024, de http://postalesdevalencia.blogspot.com/2013/02/jardines-del-botanico.html
Figura 7. a) Puerta del Invernadero de la Balsa, b) Detalles de hierro del Invernadero Tropical, c) Ornamento del Invernadero de las plantas carnívoras, d) Invernadero de los helechos, e) Interior del Invernadero de la Balsa, f) Interior del Invernadero Tropical. Fuente propia.